Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

I Reyes 13, 1-8

1 Por orden de Yahveh, un hombre de Dios llegó de Judá a Betel
cuando Jeroboam estaba en pie sobre el altar para quemar incienso,

2 y por orden de Yahveh apostrofó al altar diciendo: «Altar, altar, así
dice Yahveh: Ha nacido a la casa de David un hijo llamado Josías
que
sacrificará sobre ti a los sacerdotes de los altos, a los que queman incienso
sobre ti, y quemará huesos humanos sobre ti.»

3 Aquel mismo día dio una señal diciendo: «Esta es la señal de que
Yahveh habla: el altar va a romperse y se va derramar la ceniza que hay
sobre él.»

4 Cuando el rey oyó lo que el hombre de Dios decía contra el altar de
Betel, extendió su mano desde encima del altar diciendo: «Prendedle.»
Pero la mano que extendió contra él se secó y no pudo volverla hacia sí.

5 El altar se rompió y se esparció la ceniza del altar según la señal que
había dado el hombre de Dios por orden de Yahveh.

6 Respondió el rey al hombre de Dios: «Aplaca, por favor el rostro de
Yahveh tu Dios, para que mi mano pueda volver a mí.» Aplacó el hombre
de Dios el rostro de Yahveh, volvió la mano al rey y quedo como antes.

7 Dijo el rey al hombre de Dios: «Entra en casa conmigo para
confortarte y te haré un regalo.»

8 Dijo el hombre de Dios al rey: «Aunque me dieras la mitad de tu
casa no entraré contigo y no comeré ni beberé agua en este lugar,